¿Qué hay realmente dentro de esa lata de jurel que tienes en casa? Una reciente investigación ha encendido las alarmas en todo el país, revelando que podrías estar comiendo caballa, sardina o cualquier otra cosa, menos el nutritivo pescado que creías comprar.

Un escándalo alimentario ha remecido a los consumidores chilenos. Marcas de conservas tan conocidas como Coliseo, Barquito, Novamar, Acuenta y Unimarc están en el centro de la polémica por vender productos etiquetados como «jurel» que, en realidad, contendrían otras especies marinas. Según los primeros informes, se trataría de pescado procesado en China que no corresponde al jurel del Pacífico Sur (Trachurus murphyi), el único reconocido oficialmente como tal en Chile.

Este masivo engaño, que podría afectar a cerca de 30 millones de latas ya comercializadas, no solo representa una falta sanitaria, sino que vulnera directamente los derechos del consumidor y plantea serias dudas sobre la calidad nutricional de lo que estamos llevando a nuestra mesa.

No es solo un Nombre, es tu Derecho

Desde una perspectiva legal, el caso es claro. La Ley del Consumidor en Chile obliga a las empresas a proporcionar información veraz y transparente sobre sus productos. Cuando una etiqueta dice «jurel», el contenido debe ser jurel, sin trampas ni ambigüedades.

Expertos legales, como el académico César Eugenio Vargas Rojas de la UNAB, señalan que si se confirma el engaño, estaríamos ante una de las mayores transgresiones al derecho a la información en la historia reciente de Chile. Esto abriría la puerta para que el SERNAC o las asociaciones de consumidores inicien acciones colectivas en busca de compensaciones para los miles de afectados.

Menos Nutrientes por el Mismo (o Menor) Precio

Más allá del fraude legal, existe una diferencia nutricional importante. El PhD Cristian Araya-Jaime, académico experto en genómica de peces de la Universidad de La Serena, aclara que si bien consumir caballa o sardina española no es un riesgo para la salud, sí representa un perjuicio nutricional y económico.

El jurel chileno es considerado un «superalimento» por su altísimo valor proteico, su riqueza en vitaminas, hierro y, sobre todo, en ácidos grasos Omega 3, 6 y 9, fundamentales para el desarrollo del sistema nervioso, especialmente en niños. Las especies encontradas en las latas fraudulentas, aunque más baratas de producir, poseen un perfil nutricional inferior.

En resumen, el consumidor paga por un producto de calidad superior y recibe uno de menor valor, un engaño que afecta directamente su bolsillo y su alimentación.

¿Fallaron los Controles?

La situación deja en evidencia una posible falla en la fiscalización de los productos importados. Mientras Chile se rige por estrictas normas para exportar sus propios productos —debiendo especificar con exactitud el contenido de cada lata para mercados como el europeo—, este caso sugiere que los controles sobre lo que ingresa al país podrían no ser tan rigurosos.

¿Cómo Protegerte como Consumidor?

Ante la duda, la recomendación de los expertos es clara:

1. Lee la Etiqueta: Tómate un minuto para revisar el origen del producto y, si es posible, la especie de pescado que contiene. La ley de etiquetado exige el concepto de «trazabilidad», que permite saber de dónde viene lo que comes.
2. Prefiere lo Local: Apoyar los productos nacionales no solo impulsa la economía local, sino que suele ser una garantía de que estás consumiendo el auténtico jurel chileno.
3. No te Dejes Engañar por el Envase: Las marcas suelen imitar colores y diseños para parecerse a las más tradicionales y confiables. El precio, a veces hasta un 50% más bajo, puede ser un indicador de que algo no anda bien.

Este escándalo es un llamado de atención para todos: para los consumidores, a ser más críticos y exigentes, y para las autoridades, a reforzar los mecanismos de control para que un fraude de esta magnitud no vuelva a ocurrir.