La relación entre Ignacia Michelson y Diego Venegas en el reality de Canal 13, «Mundos Opuestos», ha estado llena de altibajos. Sin embargo, una reciente e íntima cita entre ambos no solo calmó las aguas, sino que terminó en un fogoso encuentro que dejó a la DJ con una reveladora confesión.

Una cita para aclarar las diferencias

El encuentro comenzó con una clara tensión. Nacha le recriminó a Diego no haberla defendido en una pelea anterior, mientras que él le pedía explicaciones por su constante distanciamiento. Fue entonces cuando la modelo se sinceró sobre sus temores en el amor.

«Me da miedo, tiendo a escaparme de los hombres. Cualquier excusa es buena para alejarme», confesó Michelson. Incluso admitió que su plan inicial era otro: «Yo venía con la intención de terminar contigo, porque estoy sintiendo demasiado y cualquier huida es perfecta para mí. Pero en verdad, no quiero estar sin ti».

El desafío de ser «Mundos Opuestos»

A pesar de la honestidad de Nacha, Diego manifestó su frustración por sentir que es el único que cede en la relación. «Somos muy distintos, somos mundos opuestos, y no puedo estar pasándome a tu mundo constantemente», señaló el joven, pidiéndole un esfuerzo mutuo para que la relación funcione.

La DJ reconoció sus miedos como la principal barrera. «Estoy cag… de miedo, no me gusta sentir. Por eso siempre trato de escaparme de ti», respondió Ignacia, abriendo la puerta a una esperada reconciliación.

«Se volvió un demonio, tuve que controlarlo»

Finalmente, la pareja decidió dejar atrás sus diferencias y selló su amor pasando la noche juntos. Lejos de ser un momento tranquilo, el reencuentro estuvo cargado de pasión, según relató la propia Nacha al día siguiente.

Con una sonrisa pícara, la DJ contó los detalles del íntimo momento. «Diego se portó peor que yo, se volvió un demonio. Tuve que controlarlo», aseguró. Aunque confesó que las cosas no llegaron más lejos por sus propios nervios, dejó claro que la química entre ellos es cada vez más fuerte, demostrando que su romance sigue más vivo que nunca dentro del reality.